Como Luz Janeth Bedoya Arias, de 37 semanas de gestación, fue identificada una mujer que murió el pasado 20 de febrero cuando había ingresado por sus propios medios a las instalaciones del centro de salud después de reportar dolores de parto y ruptura de fuente.
La familia de la fallecida explicó que la muerte se habría producido por una dosis de penicilina que habría causado alergia en la mujer. Según ellos, el medicamento se habría aplicado sin obtener pruebas que dieran como resultado alergia o contraindicación alguna. "La médica que había de turno, decide aplicarle una penicilina de 5 miligramos sin preguntar si ella es alérgica a algún medicamento”, dijo Javier de Jesús Carmona, esposo de Bedoya.
Mientras tanto, Mónica Jaramillo Quintero, gerente del centro de salud, anotó que la Bedoya tenía un embarazo de alto riesgo por su edad avanzada y además porque ya habría padecido de una muerte neonatal, "luego de ser valorada por nuestro personal profesional, se ordenó la remisión urgente para tener atención de parto en una unidad gineco obstétrica", agregó Jaramillo.
Una denuncia contra la médica que atendió el parto ya fue radicada en la Fiscalía General de la Nación de Caldas y el proceso será llevado por la firma de abogados PROTHEGE Soluciones Jurídicas S.A.S, de la ciudad de Manizales.
"En este caso se dan tres irregularidades graves: primero la falta de resultados de alergias para poderle suministrar un medicamento como penicilina, lo que desencadena en su muerte. Segundo, tras no lograr su reanimación, tampoco la desembarazan para salvar el feto, y tercero, un engaño a sus familiares para evitar la necropsia que pudiera revelar las verdaderas causas", dijo Nicolás Llanos Montoya, abogado de la firma en mención.
Mientras tanto la gerente del centro hospitalario explicó que a la paciente y a su esposo se les había preguntado si presentaba alergia a algún medicamento y que la respuesta había sido negativa.
