La chirimia estableció un cronograma de actividades en el que organizan de manera temporal los lugares que serán visitados.
Son de mi Tierra es una agrupación musical, estilo chirimía, originaria de Aranzazu. Durante las últimas semanas han recorrido diferentes puntos de la localidad norte caldense para interpretar las más conocidas piezas tradicionales de la música folclórica colombiana. Está constituida por entusiastas de la música que han visto en la interpretación la oportunidad de llevar alegría a los pobladores de Aranzazu en esta cuarentena.El proyecto es dirigido por el destacado músico salamineño Marino Escobar, actual director de la banda sinfónica de Aranzazu y que está adscrita a la Institución Educativa PIO XI. Varios empleados de la alcaldía de Aranzazu participan en ella y colaboran para que el proyecto social funcione. La iniciativa es de Carmen Betty Echaverry, la Primera Gestora Social de la localidad.
La chirimía estableció un cronograma de actividades en el que organizan de manera temporal los lugares que serán visitados. Un gran número de sectores han recibido la desinteresada visita de los músicos. Los habitantes de los sectores beneficiados agradecen con aplausos la emocionantes interpretaciones.
Para el proyecto no se ha establecido una fecha límite, mientras los decretos que fundamentan la cuarentena existan, Son de mi Tierra seguirá arrancando la sonrisa de cientos de aranzacitas que desde sus ventanas respetando, en lo absoluto, las medidas de bioseguridad y aislamiento social, disfrutan de las piezas musicales que con maestría ejecutan los destacados instrumentistas.
Desde este espacio agradecemos a Son de mi Tierra por su compromiso.