De lo poco que se sabe de la esporádica publicación, es que solo fueron impresos unos cuántos números y que los servicios de imprenta fueron prestados por la Tip. de la T. Literaria. No hay registros de lo que significan las contracciones con las que figura la empresa editora, que tenía su planta impresora en el municipio de Salamina. Al parecer Aranzazu no contaba todavía con servicios de reproducción literaria.
El Faisán no fue el único emprendimiento periodístico de Luis Felipe Giraldo, unos 7 años después de dejar de imprimir el primero, el periodista fundó El Faro, del cual también se conocieron muy pocas publicaciones. Después de haber intentado con los dos títulos anteriores, Giraldo intentó con El Impulsor, la suerte de esta creación no fue diferente, poco tiempo después esta publicación desapareció.
Se conoce el dato de que Felipe Giraldo, después de renunciar a sus aspiraciones periodísticas, se mudó a la ciudad de Pereira, esto a principios de los años 30.
El Faisán constituye la primera referencia histórica periodística de Aranzazu. Desde el momento de la circulación del periódico en adelante han sido innumerables las publicaciones que han visto la luz en la localidad caldense. El Sport, La Hoja, El Lábaro fueron algunas de las circulaciones posteriores, de fugaz vida y poca memoria.
El número 5, de El Faisán se imprimió el 5 de abril de 1923, hoy hace 107 años y tres días.
Números cuatro y cinco de El Faisán, digitalizados por la Biblioteca Nacional de Colombia.